Patología de la edificación/Cubiertas planas/Reparación

Para la reparación de las lesiones producidas en la cubierta de un edificio en primer lugar se tienen que estudiar sus posibles causas y eliminarlas, para acto seguido proceder a intervenir sobre el propio elemento constructivo. La reparación tiene contemplar que la acción puntual o permanente sobre los elementos estructurales causada por ella no debe comprometer la resistencia o estabilidad de estos, por lo que se tiene que estudiar si la adopción de soluciones que pasen por incrementar el peso de la cubierta es asumible por el edificio. A continuación se han expuesto las posibles soluciones que cabe adoptar para la reparación de cubiertas planas ordenados según la lesión que hayan producido.


Índice


GRIETAS Y FISURAS editar

Grietas horizontales editar

Debidas al empuje del forjado causado por la dilatación. Se puede actuar evitando la irradiación de la cubierta, mediante una protección o aislándola para que produzca menor dilatación, aunque a lo mejor suficiente para seguir agrietando el peto. Esto no es posible en la mayoría de los casos, pudiéndose adoptar las siguientes soluciones:

  • Regularización de la grieta, como si se tratase de una junta de dilatación, y su posterior sellado.
  • Tapado de la grieta mediante un nuevo elemento horizontal que la proteja de la exposición exterior.

Grietas verticales editar

a) Los producidos en tramos intermedios como consecuencia de las dilataciones-contracciones del peto o alero se deben regularizar y tratar como junta de dilatación, reforzando los bordes en los petos si la solución constructiva lo necesitase. En el caso de esquinas, se realizarán las operaciones anteriores por el lado menos soleado de la esquina. Es normal que se encuentren esquinas que se han reforzado tras la aparición de grietas, siendo esta solución mala, ya que lo que hace es rigidizar más el paramento apareciendo nuevas grietas cerca de los refuerzos.

b) Si se producen por movimientos elásticos de la estructura se debe independizar el paramento de ésta y reparar la grieta. Para ello se emplean los mismos métodos que en el caso de fachadas, debiéndose garantizar la independencia especialmente entre el peto la impermeabilización del forjado mediante baberos o zabaletas.

Fisuras editar

Ocasionadas por cambios de humedad superficial en el material. Se debe sanear el acabado y sustituirlo por uno nuevo con armadura de malla de poliéster o fibra de vidrio protegida contra los álcalis del cemento. El nuevo revoco debe ser poco poroso o se debe aplicar un sellante.

DESGASTES Y DESPRENDIMIENTOS editar

Según la intensidad con que se haya producido la erosión cabe pensar en:

  • Reparación. Cuando sea muy baja dicha erosión se podrán reparar, siempre que la lesión no afecte a la integridad de la pieza y luego se pueda proteger con endurecedores. También se puede reparar colocando un nuevo sistema de pavimentación utilizando como base las piezas desgastadas.
  • Sustitución. Si la erosión es más alta la mejor solución es sustituir total o parcialmente el conjunto de elementos afectados por unos nuevos, de características similares pero con mayor resistencia a las acciones que han provocado la erosión.

En cuanto a los desprendimientos, antes de ejecutar una reparación sobre el elemento se tienen que corregir las causas que lo han provocado, generalmente humedades, grietas, fisuras u organismos. Si el problema es puntual se deberá reponer las piezas, tomando las medidas preventivas para que no se vuelvan a ocasionar lesiones como la que ha causado el desprendimiento. Si es general o se piensa que puede ser generalizable, sólo cabe la demolición y reconstrucción del elemento, teniendo en cuenta las precauciones necesarias.

HUMEDADES editar

Se enumeran a continuación dividiendo entre las que son causadas por filtraciones y las debidas a condensaciones.

Filtración editar

1.Rotura o perforación de la membrana impermeable. Lo primero que se tiene que hacer es localizarla. La reposición de la membrana se ha de producir por paños enteros, llegando hasta una limatesa o junta de dilatación para evitar que se produzcan filtraciones entre la tela nueva y la dañada, ya que no es necesario quitar ésta al servir muy bien de soporte. Si el punzonamiento se ha producido por el acceso de personas a la cubierta se debe pensar en la posibilidad de protegerla mediante algún tipo de pavimento. En este sentido no es conveniente la utilización de grava ya que facilita que se produzcan dichos punzonamientos.

2.Desgarro debido a variaciones térmicas. Se deben introducir las juntas de dilatación necesarias, practicándose en primer lugar en el tablero soporte y después en la propia membrana. No es buena solución el poner “parches” de nueva membrana por encima de la junta uniendo los dos lados, ya que acaban funcionando mal con el paso del tiempo.

3.Rotura en el encuentro con el paramento vertical. Se debe a una disposición errónea de los elementos constructivos, esto es, sin independizar la impermeabilización del paramento vertical. Se necesita rehacer de nuevo todo el borde independizándola con una zabaleta o mimbel; En el caso de que exista y a pesar de ello se halla producido la rotura, en la reparación hay que respetar dicha independencia.

4.Solape entre membrana y soporte. En este caso hay que revisar dos aspectos:

a)El drenaje, por si estuviera obstruido causando un aumento del nivel de agua, limpiándolo en su caso e instalando alcachofas en los sumideros para evitar atascos.

b)La ejecución del solape, por si se hubiera cometido alguno de estos errores: falta de protección superior debido a la pérdida de adherencia entre los materiales o falta de independencia con respecto al peto o paramento vertical de que se trate. Para resolverlo se ha de ejecutar un babero empotrado en el peto, si la superficie de la cubierta es poca y no necesitamos independencia, o una zabaleta, si es más grande.

5.En un sumidero. La reparación más aconsejada es la sustitución entera, ya que puede deberse a múltiples fallos y un intento de reparación parcial puede ser peor.

6.Ausencia de membrana. Se tiene que poner, bien levantando el pavimento y reponiéndolo después o utilizándolo como base.

7.En Aleros. Habrá que corregir la posición relativa de los elementos, dotando al alero de mayor vuelo o mayor inclinación o introducir un goterón en el borde. Si se trata de un alero lateral y está construido con teja curva, podemos actuar sobre la última teja, cambiándola de cobija a canal, para asegurar que no se vierte agua hacia la fachada.

8.En Canalón.

a) Visto. Habrá que atender fundamentalmente a dos consideraciones:
  • Si se ha superado la capacidad del canalón, desbordándolo, hay que sustituirlo por uno nuevo de mayor capacidad.
  • Si se ha desprendido, produciendo pendientes contrarias a las originales, se debe, una vez comprobada la capacidad, sujetar adecuadamente intentando no incurrir en los errores que provocaron el desprendimiento:
  • Sujeciones débiles o muy separadas.
  • Sujeciones metálicas sin imprimación anticorrosiva o sin la protección para evitar el par galvánico (uniones de distintos metales).
  • Falta de mantenimiento, provocando acumulación de tierra que aumente el peso.
En todo caso al repararse se ha de dejar un espacio hasta la pared de 5 cm para evitar que el agua al rebosar vaya directamente al paño de fachada, y asegurar la inclinación indicada.
b) Oculto. La reparación irá encaminada a anular las causas indirectas que lo han provocado:
  • Asegurar un solape suficiente, de al menos 5 cm del elemento de cobertura sobre el canalón en la parte alta.
  • Asegurar la capacidad del canalón, mediante el cálculo de las superficies pluviométricas.
  • Limpieza de sumideros y bajantes e instalación de alcachofas para evitar atascos.
  • Mejorar el solape del canalón sobre la parte inferior del alero, sustituyendo las piezas necesarias, incluso todo el canalón.

9.En Albardilla. La reparación irá encaminada en alguna de las siguientes intervenciones:

  • Sellado de juntas. Cuando las piezas son muy grandes y, por retracción se han abierto las juntas.
  • Sellado de materiales porosos. Mediante productos endurecedores o selladores de resinas acrílicas o epoxídicas.
  • Sustitución de piezas enteras. Procurando que las nuevas tengan junta adecuada, inclinación y goterón en los dos lados.
  • Colocación de nueva albardilla. Generalmente de chapa, teniendo en cuenta que no produzca nuevas lesiones.
En la imposta se han de contemplar las siguientes indicaciones:
  • Resalto de 5 cm antes de encastrarse la chapa en la pared.
  • Máxima inclinación de la protección superior.
  • Sellado del encuentro de la protección con la pared mediante material elastómero.

Condensación editar

Para que se produzca esta lesión deben confluir varios factores físicos. Esto hace importante que se estudie en profundidad la reparación a realizar, ya que alguna vez pueden parecer paradójicos, al ser por medios indirectos.

1.Condensación superficial interior. Hay dos posibilidades de actuación:

a) Evitar la condensación. Por uno de los siguientes medios:
a.1) Aumentar la temperatura superficial interior. Se puede recurrir a métodos activos, como calefacción, o pasivos, aumentando el coeficiente de aislamiento del cerramiento. Para ello se ha de estudiar la extensión del problema, para evitar, si se trata de que el fallo se produce por la existencia de un puente térmico no agravar el problema colocando el aislamiento ininterrumpidamente (en general por la cara exterior). Las soluciones que se pueden plantear son las siguientes:
  • Aplicación de hoja exterior de material aislante, protegiéndolo cuando sea necesario.
  • Relleno de la cámara de aire con espumas. No elimina puentes térmicos causados por la estructura, al interrumpirse por ésta.
  • Colocación de aislante en el interior. Si no supone una barrera de vapor puede seguir produciéndose condensaciones en la capa anterior mientras que si funciona como tal produce un aumento de la presión de vapor del local.
a.2.) Disminuir la presión de vapor interior. Se puede conseguir ventilando más el local, ya sea de forma natural o forzada. A su vez puede ser temporal, regulada por los propios usuarios o permanente, actuando sobre la estanqueidad de las ventanas. Para ello se puede aumentar la permeabilidad de las carpinterías o instalar rejillas. También se pude preparar una superficie que se pueda limpiar fácilmente para que se produzca una condensación.

2.Condensación intersticial. Nada más que cabe la posibilidad de evitar que se alcance la temperatura de rocío en ningún punto del cerramiento. Para ello se puede aumentar la temperatura general del cerramiento, aislándolo por su cara exterior, o reduciendo la presión de vapor de agua bien aumentando la ventilación del interior o bien colocando barreras de vapor en la cara interior. En el último caso hay que estudiar que la nueva situación no produzca nuevas condensaciones superficiales.

DEFORMACIONES editar

Caben dos tipos de actuación:

  • Reparación. Si la estructura es accesible desde abajo y se ve la posibilidad de recuperación, se puede proceder a ejecutar un apeo permanente, mediante vigas que corten a las deformadas en la mitad de la luz, refuerzo de cada una, etc. Se debe tener en cuenta la revisión de la pendiente de los faldones a efectos de que la cubierta siga desaguando.
  • Sustitución. Se dará cuando los elementos estructurales no sean recuperables, procediendo a su demolición y reconstrucción.

EFLORESCENCIAS Y SUCIEDADES editar

Para la reparación de eflorescencias se tiene que tener en cuenta que es una lesión secundaria, producida por una humedad. El primer paso es siempre la reparación de dicha causa. Una vez resuelto esto se realiza una limpieza de la fachada, estudiándose bien el método a utilizar por la posible aparición posterior de nuevas eflorescencias producidas al limpiar la fachada, debidas a la disolución de sales presentes en el paramento por el disolvente empleado. Los métodos de limpieza son:

  • Natural. Cuando la sal sea soluble, se limpiará mediante agua pulverizada a presión y con la ayuda de un cepillo. A continuación se debe asegurar el secado.
  • Química. Utilizando ácidos o bases capaces de disolver la sal. Se tienen que aplicar muy diluidos y lavar con agua después de su aplicación para evitar efectos secundarios en los elementos constructivos. Debido a estos efectos se tiene que estudiar muy bien la utilización de este método.
  • Mecánica. Cuando genera una costra insoluble. Se eliminan mediante abujardados o raspados manuales o mecánicos. Si esta acción provoca alteraciones en la superficie del material se deben aplicar selladores transpirables o endurecedores.

Después de realizar la limpieza se debe dar una protección superficial hidrofugante mediante sellados o reposición de pinturas, asegurándose de la permeabilidad al vapor de agua cuando encierra un local en uso.

Las actuaciones reparación de suciedades pasan por evitar la causa (sustitución de hilera de borde de cobijas por canales o incorporación de goterones en todos los cambios de plano de cornisas e impostas) y efectuar una limpieza, teniendo en cuenta las precauciones que ya se han indicado para las eflorescencias.

ORGANISMOS editar

Las actuaciones e reparación se orientarán a eliminar la causa ya sea mediante un mantenimiento periódico por el que se impida que se acumule tierra y basura en las esquinas y huecos y por otra parte tratando humedades que hayan podido aparecer. Para la eliminación de los organismos se procede mediante una limpieza que conllevará el uso de productos químicos (disolventes, fungicidas) que podrían causar deterioros en los elementos constructivos, para ello se han de tomar las medidas indicadas en el caso de las eflorescencias.

Al igual que antes, tras la limpieza conviene dar una protección superficial hidrofugante, además, en el caso de mohos, es indicado aplicar una pintura fungicida.

Si la presencia de organismos ha producido lesiones secundarias, éstas se tratarán como se indica en sus apartados.