Alimentación infantil/Los aditivos alimentarios
Se han usado aditivos alimentarios desde hace siglos; salazones, ahumados, salmuera, levadura, colorantes, etc., son ejemplos de usos muy antiguos de los aditivos.[1]
¿Qué son los aditivos alimentarios?
editarEs toda sustancia que, sin constituir por sí misma un alimento ni poseer valor nutritivo, se agrega intencionadamente a los alimentos y bebidas en cantidades mínimas con objetivo de modificar sus caracteres organolépticos o facilitar o mejorar los procesos de elaboración, conservación y uso.
O como dice la Directiva 89/107/CEE del Consejo de la Unión Europea (UE): "cualquier sustancia, que, normalmente, no se consuma como alimento en sí, ni se use como ingrediente característico en la alimentación, independientemente de que tenga o no valor nutritivo, y cuya adición intencionada a los productos alimenticios, con un propósito tecnológico en la fase de su fabricación, transformación, preparación, tratamiento, envase, transporte o almacenamiento tenga, o pueda esperarse razonablemente que tenga, directa o indirectamente, como resultado que el propio aditivo o sus subproductos se conviertan en un componente de dichos productos alimenticios".[2]
¿Para qué sirven?
editarPara más información, véase el artículo «Aditivo alimentario» en Wikipedia. |
Los aditivos alimentarios desempeñan un papel muy importante en el complejo proceso de fabricación, conservación y traslado de los alimentos a cada rincón del planeta, hoy en día. Los aditivos alimentarios tienen un papel fundamental a la hora de mantener las cualidades y características de los alimentos (seguridad, características nutricionales y aceptabilidad).
¿Es seguro el uso de los aditivos?
editarLa utilización de aditivos está regulada de forma rigurosa, y los criterios que se tienen en cuenta para aprobar su uso es que tengan una utilidad demostrada, sean seguros y no induzcan a error al consumidor. Hay alimentos que, por ley, han de estar libres de aditivos, entre ellos la leche.
¿Qué son los números E?
editarEn la Unión Europea los aditivos alimentarios autorizados se designan mediante un código, formado por la letra E y un número de tres o cuatro cifras:
- E-100 a E-199: colorantes (por ej. E-120: cochinilla).
- E-200 a E-299: conservantes, para demorar el deterioro de los alimentos, evitando el crecimiento de microorganismos (por ej. E-249: nitrato potásico, salitre).
- E-300 a E-399: antioxidantes, para evitar la oxidación de las grasas (por ej. E-300: ácido ascórbico).
- E-400 a E-499: emulgentes, estabilizantes y espesantes, para dar estabilidad a las mezclas de grasas y agua (por ej. E-322: lecitina de soja).
- E-500 a E-599: reguladores de la acidez, antigrumos.
- E-600 a E-699: potenciadores del sabor (por ej. E-621: glutamato sódico).
- E-900 a E-999: varios; edulcorantes (por ej. E-951: aspartamo), para revestimiento (por ej. E-901: cera de abejas).
Referencias
editarPara saber más
editarEnlaces externos
editarInformación general (pediatría, puericultura):
Blogs sobre alimentación y nutrición:
- El nutricionista de La General. J. Revenga
- Comer o no comer. J. Basulto, A. Carpio y A. Ortí
- SCIENTIA. J. M. López Nicolás
- Díme qué comes. Lucía M. M.
Otros:
Estas direcciones se ofrecen a título informativo. No debe entenderse que las entidades citadas comparten alguna o ninguna de las recomendaciones de este texto.