Progreso empresarial

Las oportunidades audaces editar

Explica que las compañías visionarias, son aquellas que tiene una visión a largo plazo sobre su posición en el mercado, con el objetivo de ser las mejores en todos los ámbitos.[1]

Pero a pesar de ser organizaciones muy exitosas no obstante, fueron y son inmunes al fracaso, más sin embargo este tipo de compañías han sido capaces de sobresalir y superar los obstáculos que se encuentran en el camino del éxito aumentando de esta forma, los niveles de productividad a largo plazo.[1]

Ejemplificaciones editar

  • J&J:

Tal es el caso de J&J, que elaboró las venditas y remedios caseros que la llevaron a posicionarse como una de las mejores empresas a nivel mundial, también mencionado a “Marriott Corporation” como un modelo a seguir, debido a la seguridad y rapidez de tomar decisiones y oportunidades de actos inesperados y sobre la base de ello cambiar sus tácticas, apostando todo en seguir con sus objetivos de convertirse en uno de los negocios más rentables del mercado.[1]

El progreso evolutivo editar

Este modelo expone la forma en que las organizaciones experimentan el progreso evolutivo, sobre la base de la realización de constantes y diferentes ensayos para identificar qué es lo que funciona, así como también, otra de las características es la realización de cambios que se llevan poco a poco a diferencia de las oportunidades intrépidas.[1][2]

Es por eso que a través de este modelo evolutivo existe una gran relación con la teoría de Darwin, mencionado como patrón que las especies no fueron creadas de una manera específica para sus fines, sino más bien, las especies fueron evolucionando y en torno a ello adaptándose para sobrevivir en el ambiente que les rodeaba.[1][2]

Así mismo, estableciendo el proceso de variación como ejemplo de las especies que tienen mayor posibilidad de ubicarse en un entorno favorable, y las especies que son seleccionadas para adaptarse y sobrevivir al mundo exterior o bien, no saber adaptarse y morir.[1][2]

Las compañías deben adaptarse, evolucionar, experimentar, aprender de sus errores y de esa forma saber enfrentar las dificultades que trae consigo la selección y elaboración de nuevas propuestas o proyectos, estimulando el progreso para encarar a la competencia, y sobrevivir a los nuevos cambios que traiga el futuro y sobre la base de ello definir el objetivo y lograrlo (“oportunismo planificado”).[1][2]

De igual manera, otro factor esencial para el progreso empresarial son las personas capaces de liderar empresas visionarias, ya que son capaces de establecer una orientación organizacional, es decir, de tener una visión y un espíritu empresarial.[3]

A través de estos puntos, el líder siempre busca la manera de seguir progresando, superarse a sí mismo y sobre todo tener objetivos definidos para estimular el cambio y la mejora, así como también un buen líder deja a sus empleados participar en la toma de decisiones, utilidades, motivando a sus trabajadores, con el fin de beneficiar a la empresa y sobre todo, un buen líder se encargara de preparar a su sucesor para que se encargue de la compañía después de su muerte.[3][1][2]

Otra característica de ser una persona que lidera, es aquella que hace que sus empleados crezcan y aprendan otorgándoles retos e inmensas responsabilidades, así como también fomentar la creatividad e imaginación en los trabajadores.[1][2]

Así como también, las compañías visionarias son aquellas que tienen un líder que deja establecida una “MEGA” de por vida, para que de esta forma pueda irse estimulándose a lo largo de varias generaciones de liderazgo.[1][2]

También es importante señalar que una compañía visionaria se enfoca en originar un “ímpetu industrial”, el cual consiste en realizar una serie de repeticiones de “MEGAS”, para que de esta forma la organización esté en un constante movimiento y le permita aspirar a nuevas y mejores cosas.[3]

Incluso las personas capaces de liderar tienden a enfocarse en aspectos más exigentes y retadores, ya que son individuos que saben hacia donde aspirar, lo que quieren, su misión en la vida y por consecuencia el cupo de entrada a dichas organizaciones es limitado.[1]

Referencias editar

  1. 1,00 1,01 1,02 1,03 1,04 1,05 1,06 1,07 1,08 1,09 1,10 Collins, J.C.; Porras, J.I. (1995). Empresas que perduran: principios exitosos de compañías triunfadoras. Bogotá: Norma. 
  2. 2,0 2,1 2,2 2,3 2,4 2,5 2,6 Kurb, M. (1980). La consultoría de empresas: guía de la profesión. Ginebra: Organización Internacional del Trabajo. 
  3. 3,0 3,1 3,2 Ibsen, E. (2014). «Consultores en Organización y Desarrollo de Empresas, S.A. de C.V.». Consultado el 27 de febrero de 2015.