Patología de la edificación/Propiedades constructivas

Definición: Entendemos por cubierta el "conjunto de todos los elementos que conforman el volumen que se sitúa por encima del espacio habitable más alto de un edificio" (V.V. A.A.: CLAVES DEL CONSTRUIR ARQUITECTÓNICO: TOMO III. ELEMENTOS. La envolvente del edificio. Cubiertas).

Las cubiertas inclinadas, a diferencia de las planas, se caracterizan por un sistema de expulsión de agua basado en la escorrentía rápida producida por una pendiente normalmente mayor del 15%. Como consecuencia ocuparán un volumen considerable sobre el edificio. No permiten una total libertad de diseño en cuanto a la geometría de la planta del edificio, pero en cambio se caracterizan por una mayor longevidad y bajo coste de conservación.

Componentes: faldones, vertientes o aguas; limatesas o cumbreras (aristas hacia fuera); limahoyas (aristas hacia dentro) ; aleros, canalones y bajantes... [1]

De forma general los faldones forman planos que se interseccionan dando lugar a las limatesas y limahoyas. El agua que discurre por ellos es recogida por los canalones y evacuada a continuación por las bajantes.


Elementos principales:

1_ Estrato de ventilación de la capa exterior en su caso.

2_ Soporte de la capa exterior.

3_ Capa exterior visible.

4_ Sistema asociado higrotérmico.

5_ Sistema asociado de evacuación de las aguas pluviales.


Tipologías:

Ateniéndonos a “la cobertura”, componente al que está dedicado este capítulo, y desde el punto de vista de la Patología de la Edificación, podemos clasificar los distintos tipos de cubiertas de la siguiente manera:


Según su solución constructiva:


1) Cubiertas FRÍAS: de 2 hojas. Ventiladas.


2) Cubiertas CALIENTES: de 1 hoja. No ventiladas. Solución muy utilizada para convertir los niveles bajo cubierta no habitables, en habitables. Susceptibles de sufrir humedades de condensación y recalentamiento.

a) Cubierta directa, compacta o tradicional (aislante seco).

b) Cubierta invertida (aislante mojable).


Según su tipo de cobertura:

. Cobertura DISCONTINUA. La permeabilidad se resuelve por solape o encaje de elementos cerámicos, pizarras, fibrocementos o tejas de hormigón. Son susceptibles de sufrir defectos como desplazamientos, penetraciones, roturas, pérdida de piezas, disgregación del material.

. Cobertura CONTINUA. (Impermeabilizantes). La estanquidad se garantiza por continuidad mediante coberturas metálicas, asfálticas, plásticas o solados. Son susceptibles de presentar defectos como movimientos, despegue, desgarros, roturas, punzonamientos, pérdidas de material, envejecimiento, pudriciones.


Según el material de su cobertura:

- Tejas (cerámicas o de cemento).

- Pizarras.

- Láminas metálicas y placas, Zinc o Cobre en su mayoría. También pueden encontrarse de plomo, acero o aluminio.

- Membranas impermeables.

- Paneles.

Ha de prestarse especial atención a respetar las inclinaciones y longitudes de solape propias de cada material.