Patología de la edificación/Fachadas/6.Suciedad./8.PREVENCIÓN DEL ENSUCIAMIENTO POR LAVADO DIFERENCIAL

8.PREVENCIÓN DEL ENSUCIAMIENTO POR LAVADO DIFERENCIAL. editar

El lavado diferencial de elementos de fachada lleva consigo la aparición de churretones limpios o sucios que son los que debemos atacar mediante el conocimiento de la forma de moverse del agua que los produce a lo largo de la fachada, es decir, atendiendo a sus propiedades internas entre las cuales destacan:

  • El empleo de texturas lisas y pulidas en zonas de baja exposición como rincones y bajos de edificios para una limpieza mejor de dichas zonas , y de rugosidad alta y dibujo rayado en zonas de mayor exposición a la intemperie que controlen los churretones.
  • La geometría debe estudiarse de forma que su configuración distribuya la lámina de agua de forma homogénea y sus concentraciones (ambas producen churretones), evitándose además la continuidad entre planos de diferente inclinación (con goterones, relieves...).

Detalladamente:

1.Planos inclinados, con una inclinación hacia arriba grande para evitar depósito y escorrentía lateral, justo al contrario de lo que ocurre en los alfeizares creándose churretones laterales conocidos como “bigotes”. El empleo de elementos de discontinuidad (goterones, vierteaguas o baberos) es fundamental en el paso de planos verticales a planos inclinados hacia abajo.
2. Exposición al ambiente en cuanto a rincones y esquinas como zonas de acumulación de suciedad, destacando algunos elementos importantes, como balcones y voladizos que deben evitarse si son de elevadas dimensiones, cuerpos modulares con juntas entre sus módulos preferiblemente lejanas para evitar el efecto de lavado diferencial, y molduras solo recomendables en edificios de alta exposición al viento y agua como agentes de limpieza, siendo de consideración importante la solución de jabalcones y bajantes.

Archivo:02265suciedadbigotes.jpg

Churretones en forma de “bigotes” a los lados de los alféizares de las ventanas

Archivo:02265suciedad6.jpg

Esquemas (en axonometría y alzado) en el que se observan las inclinaciones de los planos y la acumulación de suciedad en ellos junto al lavado diferencial y el empleo de goterones que impidan la bajada de la lámina por la superficie