La iniciación al Judo, es el proceso de enseñanza y aprendizaje seguido por el practicante para la adquisición del conocimiento y la capacidad de ejecución práctica de las habilidades específicas básicas; desde que toma contacto con el mismo hasta que es capaz de practicarlo con adecuación a su estructura funcional.
Un individuo está iniciado en judo cuando, tras un proceso de aprendizaje, adquiere los patrones básicos requeridos por la motricidad específica y especializada de este deporte, de tal manera que, además de conocer sus reglas y comportamientos estratégicos fundamentales, sabe ejecutar sus técnicas, moverse en el espacio deportivo con sentido y orientación espacio temporal de las acciones y situaciones, sabiendo interpretar las comunicaciones motrices emitidas por su compañero de prácticas en el desarrollo de las acciones.
El contenido técnico del judo, se agrupa en dos campos, el tachi waza (técnicas en la posición de pie) y el ne waza (técnicas en la posición de piso). El nivel de desarrollo y progreso que va alcanzando el judoka es correspondiente al color de su cinturón, el cual se irá oscureciendo en la medida que dicho progreso se perciba. En el judo utilizamos los siguientes colores de cinturones: inicia con blanco, posteriormente y en este orden, amarillo, naranja, verde, azul, café y negro. Existen otros colores que sólo corresponden a maestros de mayor rango.
Para el aprendizaje de las técnicas, tanto del tachi waza como del ne waza, es indispensable conocer y entrenar los fundamentos básicos de cada campo de acción.