Diferencia entre revisiones de «En persecución/DIP»

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Línea 7:
''Subo a mi P40-B en “Cambrai”, me ajusto los atalajes de sujección, cierro el techo móvil de la cabina e inicio la rutina pre-vuelo: bloqueo del patín de cola, rueda de trimado del timón de profundidad atrás a tope, ajuste de RPM al máximo, escucha y búsqueda de intrusos. No se ve ninguno alrededor. Son las 13:45 (hora local) y los perros de caza son demasiado perezosos para ladrar en la abrasadora tarde francesa. Arranco el motor y empujo la palanca de gases a fondo, dejando atrás los hangares del lado sur. Voy trepando con cuartos de tonel hasta los 4.000 m. donde estabilizo el avión y me dirijo al Este hacia el campo de batalla, todavía alabeando en un suave zig-zag, compruobando mis seis cada dos segundos.''
 
''No se ve nada en el “Meuse” salvo una vista fantástica a 4.500 m. de altitud. Ninguna formación enemiga, ni siquiera un simple avión de reconocimiento. Pues nada, me nivelo previendo una solitaria y aburrida espera sobre el condado de Bertrix-Acremont. Me desplazo a una velocidad de 340 IAS mientras entro en la zona por el Suroeste. ¡Ah! Un contacto entrando rápidamente por el este a unos 4.000 m. – amigo probablemente -. Lo pierdo entre las nubes mientras viro hacia la izquierda para coger la estela. Dos segundos después vislumbro un 109 maniobrando a mis seis desde el oeste, a mi misma altitud. Vaya, vaya, quién lo hubiese dicho. Alguien más ha debido estar aquí no hace mucho alborotando el gallinero. Subo las revoluciones al máximo y me tomo un segundo para evaluar su estado energético. Mismo nivel, o casi. Todavía estoy fuera de su alcance, ni tan siquiera cerca. Viro hacia la izquierda y me dirijo de frente hacia él. Breves segundos antes del cruce viro bruscamente hacia la derecha. Un instante después estamos mirándonos carlinga con carlinga, lo dejo ligeramente atrás obligándole a forzar el viraje. Entramos en unas tijeras en espiral durante breves momentos y entonces se lanza hacia abajo, ena la vertical, más o menos. ¡Maldita sea! Esos Fokkers son rápidos, pero no lo suficiente como para escapar del alcance de los 12'70 mm (.50). Alargo el tiro y lo alcanzo, dejando en su cola una fina estela de fluido.''
''La lucha baja a 3.000 m. Tengo varias oportunidades rápidas de tiro, consiguiendo alcanzarlo brevemente en alguna. Se revuelve forzando los virajes todo lo que puede, gastando gran cantidad de energía. Lentamente lo voy enfilando, apuntillándolo un poco más. Intenta huir en la vertical y justo ahí lo tengo. Suelto una ráfaga generosa y observo como desaparece – al tiempo que alcanzo a ver otro 109 cercano -. Este otro parece haber contactado desde abajo y entra casi sin energía. Lo enfilo también y lo dejo totalmente ciego. Me encuentro en una situación incómoda, muy cerca del suelo, y es el momento de decir ¡adiós! Me escabullo hacia el norte rompiendo contacto completamente hacia el Este antes de iniciar una suave trepada hasta la altitud de crucero. Visito Wiltz – incomparable – y dudo si volver. No, seguiré a Verviers y Aachen.''
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{{cita|''(1) Walter Mitty es un personaje de ficción de la novela corta de James Thurber, "La vida secreta de Walter Mitty", publicada en 1941. Mitty es un hombre sumiso, bondadoso, que vive en su imaginación una intensa vida paralela: en unas pocas docenas de párrafos se imagina que es un piloto de combate, un cirujano de urgencias, y un temible asesino. Se ha convertido en un clásico del género tan popular que aparece en diversos diccionarios de habla inglesa (N. del T.)''|||}}
 
Aprender a manejar un juego de ordenador debería de ser una tarea sencilla. La mayoría de los juegos son fáciles de dominar una vez que averiguas como funcionan, pero jugar en red una partida multijugador de combate aéreo es una notable excepción porque no es predecible. Sencillamente hay demasiados factores a considerar en cada momento: más allá de ciertas funciones automáticas la acción transcurre de forma improvisada, no se ajusta a ninguna norma y es impredecible ya que cada acción o parcela del entorno es la de otro ser humano –y todo sucede en tiempo real-. De hecho, se tiende a estrechar de tal forma la diferencia entre ficción y realidad que hay quien argumenta que la ficción ES realidad. EnDe algún aspectomodo esto es totalmente cierto.
 
Rendimiento, tácticas, psicología y física del mundo real se llevan a este mundo virtual, hasta límites que dependen de la visión del creador y de la perspicacia del programador. Cuando llega el momento del combate, aquello que funciona – o no funciona – en la vida real, también funciona o no en el juego. Por tanto, saber una cosa o dos al respecto aumenta la probabilidad del piloto virtual de destacar. Hay juegos que permiten hacer trampas o usar atajos para conseguir sus objetivos. No hay atajos o "bonus" en el mundo virtual. No se puede simular ser un as.
 
El combate aéreo parece tan sencillo... no hay más que apuntar con tu avión al otro y derribarle, ¿no? ¡Pues no!. No es por casualidad que las habilidades de combate aéreo son lo más difícil de aprender – estamos hablando aquí de cuatro dimensiones -, en un entorno en permanente cambio. Aquel que no llegue a una solución válida en cada momento se convertirá muy pronto y de forma involuntaria, en un elemento decorativo más del paisaje.
 
Unos pocos elegidos nacen para ser pilotos de combate. Si eres de los que no consiguen regresar a base en condiciones normales, tómalo como una señal inequívoca de que tú no eres uno de ellos. Te hará falta practicar, y practicar, y practicar todavía más, hasta reducir tus errores hasta un nivel mínimo de supervivencia, y aun así existe una probabilidad mínima de encontrarte con el Barón Rojo en tu próxima misión, ¡así que estate preparado!