Diferencia entre revisiones de «En persecución/El entorno/Los jugadores»

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Un ejemplo: un día despejado me encaminé hacia el frente en un Dewoitine D.520 a altitud algo inferior a la de mejor rendimiento del avión (5.500 m.). Estaba no muy dentro de “territorio comanche”y había estado observando diligentemente el cielo en todo momento desde el despegue. Volaba de forma rutinaria en una suave trayectoria ondulada – “volando sinuoso”- con cuartos de tonel para vigilar completamente mi sector trasero cada 4-5 segundos sin perder de vista ni una sola vez el resto del cielo. Aún así un 109E se las apañó para acercarse sigilosamente a mi.
 
''La primera noticia que tuve de su ataque fue un rastro de trazadora que pasó volando junto al ala y la carlinga. Apenas podía creer que estaba siendo atacado. Al tiempo que viraba algo en subida para salir de mi incredulidad, vislumbré al bandido a menos de trescientos metros de distancia justo a mi cola y ligeramente arriba, e inmediatamente acentué la maniobra pasando propiamente a una acción evasiva. ¡Que suerte que era un mal tirador y no se había acercado más antes de abrir fuego! Ya había recuperado algo de fuerza así que realicé unas tijeras voladasen espiral y para mi satisfacción vi pasar al 109 al instante, tras lo cual me puse inmediatamente tras él. Hizo un suave ascenso para alejarse y por la forma de manejar su aparato supe que había dejado de verme. Curiosamente, no hizo mucho esfuerzo en recuperar el contacto visual y optó por seguir – un error funesto, puesto que no se puede luchar contra lo que no se ve. Afortunadamente su índice de acercamiento no había sido grande y me las arreglé para alcanzarlo con unos disparos de cañón justo al reducir la velocidad al final del ascenso, alcanzando la parte trasera del fuselaje desde abajo a sus siete. Pude ver como se estremecía con los impactos tras lo cual entró en un largo picado, todavía sin verme, y yo lo seguí. Habiendo descendido un kilómetro pasó a una trepada muy pronunciada, lo que me permitió acortar en su trayectoria circular y apuntarle al llegar al punto más alto – sorprendentemente parecía también estar volando a bajas RPM. Mi cañón le alcanzó de nuevo, atravesándole desde atrás y abajo, incendiando inmediatamente su aeronave.''
 
El combate duró en total un minuto como mucho y aparte de la entrada inicial tuve todo el tiempo el control del vuelo. Sólo con haberse retirado después de la primera pasada fallida no hubiese tenido ningún problema – pero dejó de verme y perdió el combate. ¡Sin embargo, el hecho de que hubiese conseguido sorprenderme era desconcertante!