Consideraciones generales para el trabajo en hormigón fresco


Consideraciones generales para el trabajo con hormigón fresco

Antes de comenzar hormigonado:

• Se ha de comprobar que el encofrado es impermeable, que no puede moverse y que tiene las medidas precisas

• Se ha de comprobar el número, diámetro, distancias, uniones y la limpieza de las armaduras.

• Se han de limpiar los encofrados, se han de fijar algunas aberturas de limpieza en la solera y se ha de humedecer el encofrado suficientemente y en el momento oportuno.

• Se ha de comprobar si todas las instalaciones se encuentran dispuestas para entrar en servicio y si la relación de mezclado es exacta.

Armaduras:

• Conviene asegura la armadura contra los desplazamientos y contra el pisoteo; en caso necesario se podrá disponer unos pasos.

• Hasta el momento de hormigonado las armaduras deben mantenerse libres de salpicaduras de hormigón, siendo precisa su eliminación en caso de que sucediera.

• Una vez hormigonado será preciso remover el espacio comprendido entre las armaduras mediante varillas, con el fin de desplazar las piedras gruesas aprisionadas entre ellas permitiendo la entrada y distribución de la mezcla.

• Las armaduras verticales han de colgarse para que no se hundan.

• Es precisa la protección de los hierros que sobresalen del hormigón fresco, de forma que el hormigón pueda fraguar son ninguna perturbación.